Para hablar del "SI" de María, vamos a partir del texto Bíblico de San Lúcas:
María entonces dijo al ángel: «¿Cómo será esto posible, si no conozco varón?»Contestó el ángel: «El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el niño santo que nacerá de ti será llamado Hijo de Dios.También tu parienta Isabel ha concebido un hijo en su vejez y ya en el sexto mes la que era considerada estéril. Para Dios, nada es imposible.» Dijo María: «He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra.» (Lc1,34-38)
Vemos en el texto a una joven hebrea que había experimentado el amor de su Padre Dios y su deseo de corresponder a ese amor con un sacrificio. María renuncia a la maternidad. Abro un paréntesis: (cosa que para las hebreas en ese tiempo, era humillante no tener hijos. El salmo 128,3 nos manifiesta la importancia de la maternidad: "Tu esposa, como parra fecunda, dentro de tu casa; tus hijos, como brotes de olivo, en torno a tu mesa". La que no podía tener hijos sufría mucho, eran despreciadas)Cierro paréntesis. María quiso correr el riesgo de no ser madre y tener que sufrir esa humillación por amor al Padre, sin embargo, la humildad la llevo a ser enaltecida, Dios no le quita la maternidad, al contrario, la llama a una maternidad extraordinaria.
Es importante profundizar aquí lo que significa esa llamada, esa llamada cambió todos sus planes. Desde ese momento MARÍA FUE TODA UN SI, UN FIAT, FIAT, FIAT para el del Cielo. María entrega a Papá Dios su corazón, con toda su voluntad y sentimientos, un corazón que empieza asemejarse a la uva en el lagar, comienza a ser exprimido poco a poco hasta que al final de la vida da el mejor vino, el vino de la Alegría a la Iglesia y en ella solo quedó el AMOR, el AMOR QUE LA HIZO EUCARISTÍA.
Ahora bien, ¿que significa SI, EL "SI, HÁGASE EN MI SEGÚN TU PALABRA"?, es la disposición del alma a los designios de Dios en cualquier lugar y circunstancia. Cuando le decimos SI al Señor, empezamos a experimentar el llamado a conformarnos a la imagen y semejanza de Dios. Cada vez que digo SI, estoy dispuesto a comprender que los caminos de Dios no son nuestros caminos. Pero ese Si, no es sólo comprender que nuestros planes, ya no son los nuestros, sino es saber que esos cambios de planes implican la formación de la virtud de la FE en mi vida, la misma FE que tuvo María. Vamos más profundamente aún en lo que significa esa formación de la virtud de la Fe en la Santísima Virgen. Si vemos la vida de María al lado de José y de Jesús, para ella no hay explicaciones. Por ejemplo: Ella estaba en tinieblas en cuanto a la reacción de José, al enterarse de su embarazo. Su Fe fue firme al escuchar la voz del Ángel, ella le creyó, ¿que pasaría con José? eso fue oscuridad, no hubo explicación. Jesús a los 12 años le da una respuesta al encontrarlo en el templo, que fue todo un mundo de oscuridad, y así sucesivamente todos los acontecimientos de la vida de María, llenos de dificultad y tinieblas . Es que la Fe no disipa la oscuridad, por el contrario la impone. Y en eso radica su sentido. La madre de Dios al vivir de Fe, vivía al mismo tiempo en gran oscuridad y era sometida a pruebas de fe, a veces muy difíciles, como el hecho de caer en la tentación del temor y de la inseguridad al nacer Jesús en Belén.
Al meditar en esto, viene a mi mente la vida de la Madre Teresa de Calcuta, quizá ahora podamos entender porque la vida de la Madre Teresa, fue una vida llena de tinieblas, porque la Madre tuvo la gracia de conformar su corazón con el corazón de María y viviendo de Fe como la santa Madre del Cielo, paso al mundo de creer siempre aunque todo fuera dificil y oscuro, sabía que allí se realizaba en el SI LA VOLUNTAD DE DIOS, y hoy por eso esta grande en el Reino de los Cielos, porque María la hizo igual que su Hijo, dio la vida hasta el extremo por los demás.
Si hemos entendido lo que hemos tratado de plasmar en este texto hasta ahora, podremos empezar a aplicarlo a nuestra vida personal.
Decir SI, al llamado del Señor es CAMBIO DE VIDA, para llevar a cabo este cambio de vida debo VIVIR DE FE, creer ciegamente, no significara que todo sera luz, es lo contrario se intensificara LA OSCURIDAD, pero todo saldrá bien, porque cuando más oscura es la noche, más se tiene la certeza de que Dios lleva tu vida y la obra, Dios es el que te lleva en la palma de su mano. En esto contemplamos una muerte total a nosotros mismos, podríamos compararlo a una flauta traversa. Tiene un sonido espectacular, pero la flauta no se toca a sí misma, esta vacía por dentro, encima tiene unas teclas que no se tocan solas, las manos de Jesús las aprietan a tiempo y a destiempo, y el soplo del Espíritu da el sonido hermoso, la MÚSICA DE DIOS, MARÍA NOS HACE MÚSICA DE DIOS.
Bien, quiero ir encauzando nuestro final con unas palabras del padre Tadeus Daczer:
"María, ante las difíciles pruebas de la fe, es para nosotros un cargo de conciencia. En su vida todas las pruebas a que fue sometida terminaron con el fortalecimiento de su abandono. Ella, a pesar de haber experimentado tantos sufrimientos, jamás defraudo a Dios. En Ella no hubo divergencia entre el modelo imitado y la imitación, en su vida el ideal divino cobro cuerpo de una manera plena; de forma que se convirtió en la obra maestra de Dios, en la encarnación perfecta de sus planes. Nosotros mientras tanto, siempre creamos momentos de divergencia entre la fe y la vida, entre nuestras palabras y nuestros actos, entre los ideales y su realización. Como resultado de las pruebas a que es sometida nuestra fe, retrocedemos o nos apartamos. Y es en ese sentido en el que María es un reproche a nuestra conciencia".
Ahora, después de leer o escuchar este texto, no creas que es casualidad, pero es un grito de Dios hoy para ti y para mi: " ¿Al igual que María, quieres colaborar con la salvación de las almas y la extensión de mi Reino?" Son muchos los que se pierden porque son pocos los que oran y se sacrifican. Tu vida y la mía, esta compuesta dice el P. Daczer de anunciaciones continuas, entendidas como llamadas de la gracia y pruebas de fe. El tiempo es un tesoro, porque es la presencia de Dios. CADA MOMENTO ES UNA LLAMADA PARA TI Y UNA PRUEBA PARA TU FE; POR OTRA PARTE, PARA DIOS ES UNA ESPERA:¿ME DIRÁS SI COMO MARÍA?
